Baile, introspección, amistad y groove son los pilares de este álbum de una banda conformada por, precisamente, amigas.
Amor Elefante lanza “Amigas”, su quinto disco de estudio que luce un fuerte espíritu pop. La banda formada por Rocío Bernardiner (voz, guitarra), Rocío Fernández (voz, batería) e Inés Copertino (teclados, samplers) suma como bajista a Lucila Pivetta (Mi Amigo Invencible) consolidando así un poderoso y magnético cuarteto de chicas.
“Amigas”, disco que marca el regreso de Amor Elefante a paso firme, prometiendo un año lleno de shows y sorpresas, tiene grandes momentos bailables como la memorable “Foto de una coreografía” así como canciones que parecen salidas de una escena de película “Nos va a ir re bien” y otras que nos invitan a reflexionar sobre el mundo que habitamos “Al pájaro”.
Su show en vivo es tan dulce como arrasador con sus características armonías vocales, arreglos de sintetizadores y guitarras y una base rítmica demoledora y se podrá disfrutar el jueves 24 de abril a las 20:30 en La Tangente.
EN PRIMERA PERSONA
“Para mí, Amigas representa, como en cada uno de nuestros discos, un recorte/momento de nuestras vidas, en este caso, el momento más amigas que nunca. Musicalmente siento que es el disco más representativo de nuestro sonido en vivo, así como suena, sonamos. A su vez escucho todos nuestros discos anteriores sonando en este, tiene una impronta pop, también es cancionero, un toque de diversión, de nostalgia y desamor”. Roki Fernández
“Este es mi disco preferido de amor elefante, porque me hace bailar y me hace llorar. Cuando miro nuestra historia musical me da emoción nuestro recorrido y que hoy estemos acá, habiendo atravesado juntas muchas cosas”. Rocío Bernardiner
“Amigas es un viaje redondo, lleno de color, complicidad y humor”. Lucila Pivetta
“Este disco es parecido a la sensación de volver a casa después de un viaje muy largo y lleno de aventuras, en el que cada una se extravió al ritmo de sus deseos. Entonces volvemos a reencontrarnos y cocinamos un plato delicioso, con la naturalidad de quién cocina desde siempre y también con una cuota de extravagancia, para nunca dejar de sorprendernos. La mesa se sirve no solo para nosotras, sino para una nueva comunidad de afectos musicales”. Inés Copertino